Jesús Silva R.
En cuanto a
falsificar la Constitución, es larga la trayectoria de la oposición
antichavista. El caso más reciente lo vivimos con el tema del antejuicio de
mérito al diputado Richard Mardo. Como estudiosos de la materia constitucional,
asumimos la tarea de desmontar la matriz mediática sobre la supuesta necesidad
de reunir el voto de dos terceras partes de la Asamblea Nacional para allanar
la inmunidad parlamentaria, tal como consta de la reciente entrevista que nos
fuera realizada en Venezolana de Televisión (VTV Canal 8) y cuyo video rogamos
sea difundido por que expresa la verdadera interpretación constitucional: http://youtu.be/0TNyKH5WL_8
En esta
tradición de falsedad orquestada por juristas leguleyos, se esconde un nuevo
plan para asaltar el poder y convertir a Venezuela en colonia norteamericana o
un Estado Libre Asociado. En efecto, para que la Cuarta República salga de su
ataúd, sueñan ahora con derogar la Constitución Bolivariana a través de una
Asamblea Constituyente.
Mientras los
conspiradores buscan el 15% de los electores inscritos en el registro civil y
electoral (Art. 348 CRBV) para convocar a este acto, seguirán probando suerte
con su doble agenda, actuando tanto en la luz (democracia) como en la sombra
(conspiración).
Si como
producto de la guerra económica que impulsan contra el país (acaparamiento,
especulación, dólar paralelo, etc.) así como de las diversas formas de golpear
la gobernabilidad y perturbar la vida ciudadana (paro universitario, paro
médico, violencia penitenciaria, etc.), la derecha lograra una mayoría
electoral y volvieran al poder mediante esa Asamblea Constituyente, sepan que
las primeras medidas contrarrevolucionarias serían:
1) Reactivar
el Terrorismo de Estado mediante para que asesinatos por motivos políticos,
desapariciones forzadas, torturas y otros crímenes contra los derechos humanos
sean aplicados contra la disidencia. Y los que protesten por hambre terminarán
siendo acribillados como en aquel sangriento febrero de 1989. (Para desaparecer
cualquier rastro de chavismo en Venezuela).
2) Destruir
la inversión social (porque para el neoliberalismo esta significa gasto
improductivo) y dirigir los mayores fondos de la nación al financiamiento de
empresas capitalistas que exploten la mano de obra barata de los obreros
venezolanos sin leyes laborales que los protejan.
3) Privatizar
la industria petrolera venezolana y entregarla nuevamente a las manos del
imperialismo norteamericano. Eliminar las nuevas formas de organización del
poder popular para que la democracia vuelva a estar caracterizada por un pueblo
acorralado que vota cada 5 años por sus propios explotadores representados en
partidos burgueses.
4) Reimponer
un modelo nacional donde el capitalismo se expanda sin regulaciones, mientras
profesionales y técnicos escasamente sobrevivimos de un sueldo.