24 junio, 2012

GOLPE DE ESTADO EN PARAGUAY

Por: Jesús Silva R.



Si ya hubiéramos desmantelado las reglas del Derecho Burgués, e implantado suficientemente el Estado Popular, entonces el caso político (destitución) contra Fernando Lugo (Presidente de Paraguay procesado por el Congreso de ese país) sería hoy totalmente inimaginable.

En efecto, se derrumba la vieja teoría conservadora y academicista, respecto a que los Golpes de Estado solo pueden ser cometidos por las Fuerzas Armadas, pues lo cierto es que el delito no depende propiamente del sujeto que lo ejecuta (civil o militar) sino del bien jurídico que resulta vulnerado, en este caso: la soberanía popular violada por quienes desalojan del poder al ciudadano que fue legítimamente electo para gobernar.

Entonces, golpista es todo aquel que tenga la fuerza suficiente, o la situación favorable, que le permita derrocar a un mandatario, ya que irrespeta la decisión de la mayoría popular que, en el marco de la democracia y la constitución, se ha manifestado a través del voto para elegir a su representante.

De todos los poderes fácticos (los que al margen del Derecho formal, imponen su dominación) es la burguesía (clase social empresarial) quien históricamente más ha transgredido la democracia en el mundo, pues dependiendo de las circunstancias favorables o adversas para actuar (ya sea por vía pacífica o violenta), ella tiende siempre a burlar la mayoría popular e imponer a sus agentes en la jefatura del Estado y los poderes públicos de la nación.

Cuando la burguesía no tiene militares que la acompañen para dar un Golpe de Estado contra el gobierno popular democráticamente electo, entonces los aviones, las tropas y los buques son sustituidos por medios de comunicación para desprestigiar a los gobiernos que no se arrodillan ante el poder del capital. Es así que desde el frente de la propaganda mediática se han orquestado actos para derribar gobiernos, tal como ocurrió contra Hugo Chávez en 2002.

No menos común es que la burguesía se valga de sus sirvientes dentro de la propia estructura del Poder Público, para ensayar cualquier acción golpista en el marco de la legalidad burguesa que esta misma clase social ha diseñado. De lo anterior se explica que tribunales y cortes supremas de justicia produzcan decisiones aberrantes contra los principios universales del Derecho,  el elemental sentido común, y sobre todo, contra la soberanía popular que ha escogido a las autoridades públicas.

Por ello, cientos de gobernantes han sido destituidos de sus cargos de elección popular mediante juicios manipulados y sentencias absurdas que obedecen a un grosero trasfondo político y repartos económicos. Igual sucede con los parlamentos, asambleas y congresos, todos ellos órganos del Poder Legislativo, donde los senadores, diputados, legisladores y asambleístas, emiten decisiones que van en contra de la mayoría universal de los ciudadanos del Estado, ya que antes que responder a los intereses del pueblo, lo hacen ante la burguesía que los financia y promueve para asaltar los cargos públicos. De allí que en repetidas ocasiones, los parlamentos hayan impulsado la destitución de Presidentes a través de procedimientos totalmente grotescos pero con supuesta apariencia legal y constitucional.

Todo revela que el poder económico penetra y manipula constantemente la democracia tradicional, y por ello urge una transformación profunda del modelo de Estado, sobremanera en América Latina (y el tercer mundo), donde frecuentemente el poder capitalista (asociado al imperialismo gringo y otras potencias) atropella la voluntad de los pueblos y manipula a las instituciones para que generen decisiones a favor del interés grupal empresarial y transnacional.

En tal sentido, viviendo en la época de las revoluciones pacíficas, las futuras reformas constitucionales para consolidar el Estado Democrático y Social, de Derecho y de Justicia; suponen que la misma voluntad popular que elige a los gobernantes, sea la única facultada para separarlos del poder.

De forma que la facultad de los Congresos y Cortes de Justicia para destituir Presidentes, debe ser sustituida por consultas populares y referéndum revocatorio, a fin de que sea el pueblo soberano (y no los grupos políticos patrocinados por la burguesía) el que ponga y quite a los mandatarios de la nación.

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17 junio, 2012

LEGENDARIO GUERRILLERO REGRESA A LA UCV


Por: Jesús Silva R.

Máximo Canales, fue el seudónimo que recorrió el mundo entero en la década de los sesenta del siglo pasado, cuando siendo uno de los actores fundamentales de la guerrilla venezolana, este hombre mantuvo retenido al máximo futbolista de la época, Alfredo Di Stéfano (Real Madrid) como alerta para que la comunidad internacional conociera que en Venezuela se desarrollaba una rebelión contra un régimen represivo y violador de los derechos humanos.



Muchos otros pasajes de su experiencia como militante de las Fuerzas Armadas de Liberación Nacional (FALN), hacen de Paúl Del Río (nombre auténtico) un personaje verdaderamente fascinante en la historia de las luchas revolucionarias en nuestra patria y América Latina. Es así que en el marco de una actividad de sensibilización en derechos humanos, con el título "Lo político y lo jurídico de la lucha armada en Venezuela", le formulé invitación a mi amigo y camarada Paúl, para que protagonizara un conversatorio (11-06-12) con estudiantes de la cátedra de Introducción al Derecho, la cual imparto en la Escuela de Estudios Políticos y Administrativos (EEPA) de la Universidad Central de Venezuela (UCV).

 
Ante una numerosa participación de jóvenes universitarios, expusimos que una de las razones principales para el estallido de la lucha armada fue la suspensión de las garantías constitucionales cometida por el nefasto presidente Rómulo Betancourt, cuyo gobierno, a pesar de tener Legitimidad de Origen (porque nació de la elección popular), perdió Legitimidad de Ejercicio (al gobernar al margen de la Carta Magna de 1961).

Por su parte, Del Río fue enfático respecto a las libertades que fueron afectadas durante los distintos gobiernos que ultrajaron a la república durante el período 1958-1998. Empezando por la suspensión de la libertad de expresión, libre asociación, libre tránsito, el debido proceso, la prohibición de detención sin previa orden judicial salvo en situación de flagrancia, entre otras. Asimismo se refirió a la popularmente llamada Ley contra el Silencio y el Olvido, que procura eliminar la impunidad respecto a los asesinatos, torturas, desapariciones forzadas y demás delitos cometidos por razones políticas durante la mencionada etapa de falsa democracia.

Del intercambio libre y fraternal, con estudiantes que profesan diferentes simpatías políticas y partidistas en la coyuntura histórica actual; surgió la reflexión de como en aquellos años de combate armado, la UCV era el epicentro de una mayoritaria izquierda que encabezó importantes protestas contra los atropellos sistemáticos del gobierno en perjuicio de la ciudadanía.

Fue comentado que aquella UCV revolucionaria tuvo muchos manifestantes que fueron asesinados por fuerzas del orden público, además se practicó allanamiento contra las residencias estudiantiles y la propia sede fue tomada por tanques militares en el gobierno del democristiano Rafael Caldera.

En un ambiente, de profundo respeto, a pesar de la diversidad de preferencias políticas entre los presentes en el salón universitario, Paúl destacó que las FALN (a diferencia de los organismos represivos de AD y COPEI) jamás violentó el Derecho Internacional Humanitario, pues jamás fusiló detenidos, no agredió a los civiles, no secuestró con petición de recompensa, no torturó ni desapareció personas. Y puntualizó a los oyentes, que si en el régimen venezolano actual se violentará la Constitución de la República y se asesinaran estudiantes como se hizo en el tiempo pasado, él se pondría nuevamente al lado de las víctimas y retomaría todas las formas de lucha necesarias para restaurar la democracia y el respeto a la vida humana.

Como reflexión final sobre la inusual visita de este mítico guerrillero, nos queda la conciencia de que la Venezuela Bolivariana de hoy, tiene como antecedente las luchas ideológicas, políticas y militares de personajes como Paúl Del Río, alias Máximo Canales. Ha sido precisamente la acumulación de victorias y derrotas, de teorías, experiencias, de ensayos y errores, lo que ha hecho factible el proceso que actualmente se vive en nuestra patria.

Quien suscribe, como hijo de uno de esos guerrilleros (Jesús Manuel Silva Alfonso, 1943-2009) que dedicó su vida a "la liberación nacional y el socialismo", rindo testimonio a mi joven generación sobre la importancia de proseguir el legado humanista de esos combatientes que sentaron un valiente precedente de sacrificio por la dignidad del pueblo y la definitiva instauración de una sociedad sin clases. Ojalá los factores radicales actuales, aliados de la burguesía, el capital transnacional y el Imperialismo yanqui, no le obstaculicen al pueblo manifestarse siempre en democracia, por la vía constitucional, pacífica y electoral.
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03 junio, 2012

OBAMA Y SU PROPUESTA DE MATRIMONIO GAY




Por: Jesús Silva R.

No se trata de la revolución de los derechos civiles que en su tiempo lideró aquel insigne reverendo protestante, Martin Luther King Jr. Tampoco es un acto de solidaridad en favor del reconocimiento a la comunidad sexodiversa, como en época del combativo parlamentario estadounidense Harvey Milk. En realidad la propuesta Barack Obama respecto a la legalización del matrimonio entre personas del mismo sexo, obedece a un frío cálculo electoral para la conquista de su reelección como Presidente de los Estados Unidos de América.

Nótese que en ese país, la inmensa mayoría de votantes ya tienen decidido el nombre del candidato al que le concederán su voto en las elecciones presidenciales previstas para este año, y en tal contexto los sondeos de opinión le conceden prácticamente con unanimidad una prudente pero significativa ventaja al abanderado del Partido Republicano, el ex gobernador de Massachussets, Mitt Romney.

Se sabe que la fortaleza publicitaria de Romney reside en su prestigio como dirigente político con ideas progresistas, y en efecto el estado que gobernó posee un historial de ideas de avanzada en comparación con el resto de la sociedad de EE.UU., como por ejemplo, el apoyo a la legalización del aborto. Entonces, la recomendada táctica electoral para Obama ha sido precisamente igualarse a Romney en materia de progresismo y liberalismo ante los ojos del pueblo estadounidense y con ello capturar votos decisivos dentro de la comunidad LGBTI (lesbianas, gays, bisexuales, transexuales, transgéneros, intersexuales e intergéneros) que vive en la gigantesca nación norteamericana.

Sépase que en su historial como senador, el conservador Obama siempre le dio la espalda a las propuestas de reforma legal encaminadas a eliminar prejuicios y restricciones contra los derechos civiles y políticos de los ciudadanos. Del mismo modo, incumplió su promesa electoral de cerrar la Base Naval de Guantánamo (grotesco epicentro de torturas y prisioneros sin fórmula de juicio ni debido proceso), por ello su insincero ofrecimiento de instaurar el matrimonio gay y la familia homoparental en Estados Unidos, luce como un nuevo fraude electoral, del cual podrá librarse (como en anteriores ocasiones, verbigracia el caso de su reforma sanitaria) con la excusa de que el Congreso bloquea constitucionalmente sus iniciativas de ley.

En resumidas cuentas, en EEUU hay millones de personas a favor y en contra de la legalización de esta modalidad de unión conyugal, sin embargo este tema no tiene efectos polarizantes en la mayoría los electores, ya que muchos de los que simpatizan con Obama no dejarán de votar por él a pesar de que no coincidan con su idea de reforma matrimonial. De modo que en lo que respecta al marketing electoral, con esta propuesta el habilidoso aspirante a la reelección no tiene nada que perder y si algo que ganar, vale decir, el apoyo abrumador de esa comunidad que pudiera otorgarle el porcentaje de votos que se necesita para ganar las próximas elecciones.