(1979) Padre. Doctor en Derecho Constitucional. 1er izquierdista elegido IVLP por USA en 2017. Abogado penalista. Profesor UCV (TSJ SC Expediente 15-1131). English teacher. Libro MEMORIAS POLÍTICAS, UNESR 2013. Instagram: doctorjesussilva
31 marzo, 2020
28 marzo, 2020
Respuesta constructiva a narco-imputación de EEUU a Venezuela
Jesús Silva R.
Siempre he promovido una política de entendimiento y respeto recíproco entre EEUU y Venezuela porque creo absolutamente en la Carta de la ONU y su artículo 33 relativo a la resolución pacífica de conflictos.
Basado en esa misma convicción, dejo constancia de mi rechazo total a imputación penal o “indictment” del fiscal general de Estados Unidos contra el Presidente de Venezuela Nicolás Maduro y varios altos funcionarios de nuestro país porque se basa en pruebas totalmente desconocidas, sin embargo lo que salta a la vista son las consecuencias jurídicas y políticas nefastas de semejante acto:
1) La muerte de la diplomacia: se aleja demasiado la posibilidad de un acercamiento con fines de negociación de paz entre EEUU y Venezuela, pues el país imperial ha puesto una pared al catalogar al gobierno de Maduro como estructura narco-criminal. La suspensión de sanciones económicas ilegales de Washington contra Caracas ahora resulta una quimera, incluso en tiempos de coronavirus que exigen una visión humanitaria del problema. Los venezolanos muertos por covid 19 serán muertos del brutal bloqueo norteamericano que obstaculiza la compra de insumos esenciales para enfrentar la pandemia.
2) Cacería internacional anti venezolana: ni Maduro ni los demás personeros imputados por EEUU pueden viajar ni sobrevolar por los países asociados al imperialismo norteamericano porque ponen en riesgo sus vidas e integridad personal. Los miembros del Grupo de Lima, los de la UE, entre otros, figuran como potenciales colaboradores de la captura de Maduro en territorio extranjero, un caso hipotético que hundiría al país en una impredecible crisis política interna y probable guerra civil porque el bloque de poder que respalda al presidente venezolano reaccionaría en suelo patrio contra los colaboradores de la política yanqui. Lo demás se sobreentiende.
3) Pretexto para agresión gringa más feroz: al introducir la retórica de la narco-dictadura, EEUU crea una matriz de opinión internacional que facilita o por lo menos elimina obstáculos para dictar medidas económicas más nocivas contra Venezuela, nuevas confiscaciones contra bienes de nuestro país en el exterior y bloqueo de negocios así como todo tipo de movimiento bancario; terceros países con línea pro-imperialista contribuirán en la aplicación de estos atropellos. Adicionalmente, nunca como ahora fue tan grande la posibilidad de alguna acción militar norteamericana, directa o indirecta, hacia Venezuela.
Recomendaciones para el gobierno de Maduro:
1.- Empeñarse en la diplomacia y el derecho internacional: a pesar de la desproporcionada agresión que representa la narco-acusación de EEUU, insistir en las vías diplomáticas para propiciar diálogo con el gobierno norteamericano, ello incluye llamar a sectores opositores para tales negociaciones, siempre procurando acuerdos que sean fieles a las reglas de la Constitución Nacional. En paralelo, denunciar ante la ONU y demás instancias internacionales pertinentes el carácter infundado de la narco-acusación gringa a fin de romper el posible consenso o mayoría internacional que pudiera crecer hacia la convalidación de ese exabrupto jurídico imperialista.
2.- Ofrecer ayuda humanitaria a EEUU contra covid 19: si el gobierno de EEUU está radicalizado contra la administración de Maduro, no necesariamente lo está todo el pueblo estadounidense. Entonces, un gesto humanitario de Venezuela bien puede hacer abrir los ojos a amplios sectores de la sociedad de EEUU y factores políticos respecto a la falsedad de la narco-acusación y a la necesidad de rectificación hacia una política exterior constructiva hacia nuestro país. Trágicamente EEUU se ha convertido en la nación con más enfermos de coronavirus en el mundo y es evidente que necesitan ayuda urgente para sobrevivir a la pandemia. Desde Venezuela se les puede dar clases de cuarentena social como método efectivo para reducir contagios por covid 19.
3.- Incrementar la multipolaridad para contrarrestar la narco-acusación: ya que el gobierno de Trump se ha ensañado contra Venezuela y que sus medidas contra el gobierno de Maduro salpican a 30 millones de venezolanos, hay que fortalecer relaciones con otras potencias mundiales, no solo las que desde hace tiempo respaldan a nuestra nación si no también aquellas que son aliadas de EEUU pero no acompañan incondicionalmente todas las políticas yanquis, por ejemplo, si la Unión Europea discrepa con EEUU en el tratamiento a Irán y Cuba, bien pudiera desbloquear a Venezuela si nuestra diplomacia trabaja con alianzas en función de ello.
Basado en esa misma convicción, dejo constancia de mi rechazo total a imputación penal o “indictment” del fiscal general de Estados Unidos contra el Presidente de Venezuela Nicolás Maduro y varios altos funcionarios de nuestro país porque se basa en pruebas totalmente desconocidas, sin embargo lo que salta a la vista son las consecuencias jurídicas y políticas nefastas de semejante acto:
1) La muerte de la diplomacia: se aleja demasiado la posibilidad de un acercamiento con fines de negociación de paz entre EEUU y Venezuela, pues el país imperial ha puesto una pared al catalogar al gobierno de Maduro como estructura narco-criminal. La suspensión de sanciones económicas ilegales de Washington contra Caracas ahora resulta una quimera, incluso en tiempos de coronavirus que exigen una visión humanitaria del problema. Los venezolanos muertos por covid 19 serán muertos del brutal bloqueo norteamericano que obstaculiza la compra de insumos esenciales para enfrentar la pandemia.
2) Cacería internacional anti venezolana: ni Maduro ni los demás personeros imputados por EEUU pueden viajar ni sobrevolar por los países asociados al imperialismo norteamericano porque ponen en riesgo sus vidas e integridad personal. Los miembros del Grupo de Lima, los de la UE, entre otros, figuran como potenciales colaboradores de la captura de Maduro en territorio extranjero, un caso hipotético que hundiría al país en una impredecible crisis política interna y probable guerra civil porque el bloque de poder que respalda al presidente venezolano reaccionaría en suelo patrio contra los colaboradores de la política yanqui. Lo demás se sobreentiende.
3) Pretexto para agresión gringa más feroz: al introducir la retórica de la narco-dictadura, EEUU crea una matriz de opinión internacional que facilita o por lo menos elimina obstáculos para dictar medidas económicas más nocivas contra Venezuela, nuevas confiscaciones contra bienes de nuestro país en el exterior y bloqueo de negocios así como todo tipo de movimiento bancario; terceros países con línea pro-imperialista contribuirán en la aplicación de estos atropellos. Adicionalmente, nunca como ahora fue tan grande la posibilidad de alguna acción militar norteamericana, directa o indirecta, hacia Venezuela.
Recomendaciones para el gobierno de Maduro:
1.- Empeñarse en la diplomacia y el derecho internacional: a pesar de la desproporcionada agresión que representa la narco-acusación de EEUU, insistir en las vías diplomáticas para propiciar diálogo con el gobierno norteamericano, ello incluye llamar a sectores opositores para tales negociaciones, siempre procurando acuerdos que sean fieles a las reglas de la Constitución Nacional. En paralelo, denunciar ante la ONU y demás instancias internacionales pertinentes el carácter infundado de la narco-acusación gringa a fin de romper el posible consenso o mayoría internacional que pudiera crecer hacia la convalidación de ese exabrupto jurídico imperialista.
2.- Ofrecer ayuda humanitaria a EEUU contra covid 19: si el gobierno de EEUU está radicalizado contra la administración de Maduro, no necesariamente lo está todo el pueblo estadounidense. Entonces, un gesto humanitario de Venezuela bien puede hacer abrir los ojos a amplios sectores de la sociedad de EEUU y factores políticos respecto a la falsedad de la narco-acusación y a la necesidad de rectificación hacia una política exterior constructiva hacia nuestro país. Trágicamente EEUU se ha convertido en la nación con más enfermos de coronavirus en el mundo y es evidente que necesitan ayuda urgente para sobrevivir a la pandemia. Desde Venezuela se les puede dar clases de cuarentena social como método efectivo para reducir contagios por covid 19.
3.- Incrementar la multipolaridad para contrarrestar la narco-acusación: ya que el gobierno de Trump se ha ensañado contra Venezuela y que sus medidas contra el gobierno de Maduro salpican a 30 millones de venezolanos, hay que fortalecer relaciones con otras potencias mundiales, no solo las que desde hace tiempo respaldan a nuestra nación si no también aquellas que son aliadas de EEUU pero no acompañan incondicionalmente todas las políticas yanquis, por ejemplo, si la Unión Europea discrepa con EEUU en el tratamiento a Irán y Cuba, bien pudiera desbloquear a Venezuela si nuestra diplomacia trabaja con alianzas en función de ello.
25 marzo, 2020
Acuerdo entre Guaidó y Maduro contra Coronavirus
Jesús Silva R.
Esta propuesta de "Acuerdo de acción unitaria contra el Coronavirus" entre Juan Guaidó y Nicolás Maduro puede salvar a Venezuela de una mortandad incalculable. Propongo como puntos del documento que ambos deben firmar en cadena nacional de radio, televisión y redes sociales, lo siguiente:
Primero: ambos líderes se reconocen como aliados legítimos en la lucha unitaria contra el Coronavirus y por lo tanto suspenden toda forma de combate político o pelea sobre los cargos para los cuales fueron electos hasta que cese la pandemia; y así lo harán saber a la comunidad nacional e internacional para que colaboren con este acuerdo.
Segundo: ambos líderes trabajarán mancomunadamente para el inmediato levantamiento de sanciones extranjeras contra Venezuela a fin de que la República pueda libremente realizar todos los actos destinados a abastecerse de recursos materiales, financieros y humanos para enfrentar el Coronavirus y los problemas asociados a éste.
Tercero: mediante indulto o amnistía, se liberará a todos los opositores y socialistas críticos que estén presos, y cesará toda persecución penal contra los que estén imputados o acusados, siempre que no se trate de delitos en los que la Constitución prohíba beneficios (art 29 CRBV).
Cuarto: se celebrarán elecciones generales, libres, competitivas, bajo observación internacional, con un nuevo CNE equilibrado, con todos los partidos políticos habilitados, acatando el ordenamiento constitucional y legal venezolano, dentro del plazo de seis meses contados a partir de la superación total y absoluta de la pandemia del Coronavirus.
Quinto: todo lo no previsto en este acuerdo será resuelto entre ambas partes según los principios de la Constitución Nacional, la Carta de las Naciones Unidas (especialmente su artículo 33 sobre arbitraje, resolución pacífica de conflictos,etc) y el interés nacional, excluyendo todo tipo de sanciones o acciones extranjeras o internas que constituyan agresión económica o armada contra Venezuela.
Justificación del "Acuerdo de acción unitaria contra el Coronavirus". Frente al mortal Coronavirus que se encamina a igualar a otras pandemias como la gripe española que hace 100 años mató a 50 millones de personas o a la más antigua y letal peste bubónica que asesinó cerca de un tercio de la población mundial, Venezuela debe dar un paso al frente uniendo todas las fuerzas posibles en función de enfrentar de la mejor manera la calamidad del Covid 19.
Es en este contexto de crisis agravada por la pandemia, que el país debe abandonar la confrontación política interna y dejar a un lado rencores, prejuicios y discriminación entre opositores y socialistas para trabajar unidos por el interés nacional e impedir que el Coronavirus escale a números mayores de enfermos y fallecidos como ha ocurrido en países del llamado primer mundo que poseen sistemas de salud mucho más robustos que el venezolano.
En esa unión requerida para la contingencia actual, el liderazgo político nacional, de ambos polos, puede y debe dar el ejemplo. De modo que ya es hora de un diálogo con metas claras entre el líder opositor Juan Guaidó y el primer mandatario Nicolás Maduro. La agenda debe contener acuerdos concretos que le permitan a la nación elevar sus capacidades para enfrentar el Covid 19, sobre todo, cuando el toque de queda implementado por los cuerpos represivos militares y policiales sean insuficientes para controlar el problema, es decir, una vez que inevitablemente (es cuestión de tiempo) la cifra de contagios sea voluminosa, y sea urgente disponer de una infraestructura y recursos de salud ampliados para encarar el desafío de atender a miles de pacientes y salvar vidas.
Obtener más medicinas, más recintos de salud habilitados, más médicos actuando, todo ello requiere más dinero invertido para tales fines así como canales comerciales y bancarios desbloqueados a nivel internacional para adquirir los recursos ofrecidos por otros países. Hacer esto posible depende de un acuerdo político entre Guaidó y Maduro que indudablemente toda Venezuela agradecerá porque nace de la vocación humanitaria que ambos personajes demostrarán si en efecto celebran el encuentro que aquí se propone.
23 marzo, 2020
Coronavirus fabricado en Estados Unidos
Jesús Silva R.
Un arma biológica de guerra, creada en laboratorios por científicos en los Estados Unidos de América, eso es el peligroso y mortal coronavirus de acuerdo a la opinión de acreditados expertos y destacados personajes, varios de ellos de nacionalidad estadounidense.
Como punto previo, se debe mencionar que en Venezuela, merece elogio y reconocimiento la medida del gobierno de Nicolás Maduro respecto a la aplicación de una temprana cuarentena total que persigue disminuir el contagio del coronavirus y así evitar la pandemia. A todas luces el distanciamiento social entre ciudadanos es la acción más efectiva para atender esta problemática. Adicionalmente, como revolucionarios venezolanos, exigimos el levantamiento de las ilegales sanciones estadounidenses contra nuestra patria y demás estados bloqueados en virtud de elementales razones humanitarias.
Ahora bien, es público y notorio que el coronavirus puede matar más personas que una bomba nuclear porque es altamente contagioso y ya ha golpeado a cientos de miles de seres humanos en casi todos los países del mundo. Tan grave y compleja es la situación causada por el también llamado COVID19, que es imposible saber hoy cuando se terminará la pandemia, cuántas personas más serán afectadas o cuándo existirá una vacuna. Y más dramático todavía, el día que exista la vacuna ¿estará al alcance de los pobres?
Que el coronavirus se haya dado a conocer en China o que el primer brote ocurriera en la ciudad de Wuhan, no garantiza que su origen esté en ese país. Pudo ser sembrado allí por algún grupo terrorista o gobierno interesado en causar daño a la nación comercialmente más poderosa del mundo. Siendo esto así, cito lo que frecuentemente opinamos los abogados penalistas “el principal sospechoso de un delito es aquel que más se beneficia del mismo”. Justo es exigir una investigación internacional exhaustiva que determine definitivamente el origen del COVID19 pues de ahí podría obtenerse el antídoto para la prevención y sanación.
Es evidente que en las circunstancias actuales, quien tenga la cura contra el coronavirus podría dominar el globo terráqueo. Desde nuestra cosmovisión socialista, la esperada vacuna debería ponerse gratuitamente a la orden de todos los países para salvar vidas, sin embargo en el contexto del capitalismo internacional sospecho que será utilizada para la venta por emporios transnacionales o, lo que es peor, será manipulada geopolíticamente, es decir, unos gobiernos la usarán para someter a otros.
En el presente, es preocupante la actuación controversial de muchos gobiernos de países capitalistas los cuales se niegan a implementar una cuarentena radical en la población, argumentando que esto afectaría gravemente sus economías. Es como si el dinero les importara más que el contagio y fallecimiento de millones de personas.
Finalmente, como evidencia testimonial que fundamenta a este artículo, presento una primera lista de personalidades que señalan públicamente a EEUU como verdadero lugar de origen del coronavirus y el propósito de guerra biológica:
1) Francis Boyle, estadounidense, profesor de Derecho, redactor de la Ley de Antiterrorismo contra Armas Biológicas (BioWeapons)
2) Philip Giraldi, estadounidense, exfuncionario de la CIA, artículo del 05-03-20 en the Strategic Culture Foundation
3) Kevin Barrett, estadounidense, periodista. “Guerra biológica creada por EEUU e Israel”
4) Zhao Lijian, vocero de cancillería china, “mucha evidencia de COVID creado en EEUU”
5) 101 médicos iraníes en enfermedades infecciosas y pulmonares. Carta pública
6) Mahmoud Ahmadinejad, expresidente de Irán, “coronavirus fue creado en un laboratorio”
19 marzo, 2020
La patria tiene un ojo hinchado
Jesús Silva R.
"Es demasiado rápido, no tiene sentido continuar". Así le dijo el entrenador Nacho Beristain a Óscar De La Hoya, segundos antes de comenzar el noveno round de su pelea contra un entonces poco famoso Manny Pacquiao. Óscar era más grande y fuerte pero demasiado viejo y se desplazaba en cámara lenta. Manny, era enano y de brazos cortos, pero se movía tan veloz como el ratón de comiquitas "Speedy González" y se hallaba en el esplendor de sus facultades boxísticas impulsado por la juventud, divino tesoro.
Este ejemplo se repite en otros escenarios de la vida, como cuando tercamente corro con mi chancleta detrás de una cucaracha que ampliamente me supera en velocidad y al final se oculta bajo la nevera. Para eliminarla, cambio de estrategia y apelo al insecticida porque entiendo que en guerra de rapidez nunca le voy a ganar.
Pero hay casos de rango nacional que están todavía por resolver y no son materia de chiste ni sarcasmo...
Como cuando en las estructuras burocráticas, el profesional excelente se ve desplazado por otro que es mediocre en el trabajo pero fantástico en la adulación al jefe. La nación entera paga las consecuencias con malos servicios públicos.
O como cuando el pueblo busca construir el poder comunal soñado por Hugo Chávez, pero un neonato gobierno comunitario (de burócratas) le arranca competencias previstas en la ley y afianza una usurpación de funciones. ¿Dónde están hoy las comunas y consejos comunales que un angustiado Chávez reclamaba meses antes de su muerte?
O como cuando suben los sueldos, pero los precios se elevan a mayor velocidad en la vigente locura de la dolarización de facto que actualmente nos arropa.
Me niego a creer que estas son batallas perdidas o peleas de burro con tigre como dicen los llaneros.
Pues a diferencia del anciano De La Hoya, que tiró la toalla en aquella pelea y con un sólo ojo vio el final de su carrera (el otro ojo se lo cerró Pacquiao a puño limpio); el pueblo de Venezuela (hoy con un ojo hinchado en el ámbito económico, político y social) no puede rendirse frente a la guerra económica, al bloqueo imperialista, ni a la traición de apátridas que piden la invasión extranjera.
Tampoco puede esta patria bolivariana y rebelde firmar un cheque en blanco a pretendidos apóstoles que (paseándose con costosas prendas de lino rojo y viajando en lujosas camionetas japonesas del año) son sordos al grito del pobre, maltratan al soberano de a pie, consolidan el burocratismo y contribuyen (por acción o por omisión) con la corrupción que ha desgarrado a PDVSA y a otras dependencias nacionales.
Para retomar la senda del socialismo chavista, del buen vivir, de aquella clase media que tenía poder adquisitivo proveniente de su trabajo honesto, de aquel estrato popular que llenaba su carrito de supermercado pagando con cesta ticket, hace falta darle respeto y participación efectiva al pueblo, tanto en la acción política como en la económica, en alianza con un gobierno Revolucionario (con R mayúscula).
Urge rescatar el valor del trabajo, dignificar el sueldo, fomentar la producción de la pequeña y mediana empresa, priorizar la organización comunal, fomentar debate abierto, tolerar la crítica y ensayar una autocrítica gubernamental traducida en rectificaciones concretas.
La trampa de un neoliberalismo encubierto, que libera precios y choca copas de vino con grandes empresarios que especulan impunemente, puede enterrar el legado de Hugo.
Tolerar a oligarcas importadores cometiendo masivos delitos de usura en la venta de alimentos y medicinas, no dará gobernabilidad ni paz porque el pueblo se cansa y puede estallar, ni será esta la fórmula sanadora para la enferma economía venezolana.
Urgente es retomar el concepto original del socialismo, que nosotros, revolucionarios de a pie, seguimos defendiendo incondicionalmente: un modelo de Estado en el cual la clase trabajadora asume el poder económico y desde esa posición ejerce el poder político. Es tiempo de menos sectarismo y más inclusión. No habrá persecución política con fachada judicial que nos empuje a la derecha. Está historia continuará.
12 marzo, 2020
Video picante contra la polarización
Jesús Silva R.
Una voluptuosa e inteligente artista venezolana de la que estoy enamorado desde hace tiempo (y con la que me encantaría casarme este año ahora que estoy felizmente divorciado) fue estrella de un video que hizo arder las redes sociales. Mi candidatura a Rector de la UCV sirvió como plataforma para que su figura lograra más de un millón de vistas en Twitter, facebook e Instagram. Con diminuta vestimenta, mi musa declaró con picardía: “Jesús Silva, unos dicen que es capitalista, otros dicen que es comunista, pero él lo que es, es un optimista (…) que cree en gente como yo, trabajadora, luchadora (…) así que se acaba la polarización”.
VER EN TWITTER:
Nadie tira piedras a un árbol que no da frutos. No responderé mediáticamente a calumnias porque no le daré ranking a mitómanos ni a mitómanas sin vida propia ni obra que mostrar, tampoco a quienes me atacan por mi video con una dama y sus “grandes lolas”. Más bien hablaré de lo valioso de mi “Opera Prima” audiovisual. Mientras Lorenzo Mendoza con su empresa Polar explota el cuerpo de lindas muchachas para promover su bebida bochinchera y nadie lo imputa por ello, yo aún sorteo una cacería de brujas por supuestamente valerme de lo mismo en mi aspiración a Rector. Sin embargo, a diferencia del camarada Lorenzo (creo que es madurista), en mi caso, presenté un sólido mensaje de diálogo, reconciliación y unión entre los venezolanos, repito: “que se acabe la polarización”.
Nadie más en la vida pública parece hacer un esfuerzo concreto y a gran escala por aconsejar la eliminación del odio político que divide a la nación. La despolarización no da votos ni excita a la fanaticada. Sin embargo, ojalá en altas esferas se entienda que un pueblo viviendo la crisis más aguda de su historia, no puede vivir “polarizado” porque necesita comer y para conseguir comida hoy, hay que unirse (como en época cavernícola de la caza, la pesca y la recolección de frutas).
El pueblo vive la destrucción del poder adquisitivo y del irrisorio salario, el éxodo de millones de compatriotas, la hiperinflación y demás infortunios. Ante semejante crisis, poco importa ya si usted es opositor, chavista, comunista o capitalista. Aquí la prioridad es trabajar unidos como sociedad sin más peleas absurdas y desde ese escenario: rescatar a Venezuela.
Toda forma de discriminación política debe desaparecer, venga del sector público o del sector privado. En este territorio la única opción es convivir o perecer. A quienes tienen peso para influir sobre Venezuela, les aconsejo: pongan el interés nacional primero, provean al país de una solución constitucional y electoral a la crisis nacional, sometan una nueva Constitución a referendo popular. Y pongan fecha a las elecciones universitarias con voto sectorizado y paritario.
También, de mutuo acuerdo, designen a los miembros de un nuevo CNE independiente, procuren la despolarización nacional con buenas palabras y buenas acciones, pero sobre todo acepten la voluntad del pueblo expresada en el voto, cualquiera que esta sea. Lo que más le falta al país para resurgir como Ave Fenix es darse un baño de tolerancia y despolarización.
Bendito sea aquel video picante que me permitió decir, de forma inolvidable para toda Venezuela, que la polarización está condenada al fracaso político, jurídico y cultural. Sus promotores están a tiempo de rectificar. Tal vez yo vuelva a la “palestra” con otro video y otra campaña electoral, todo tiene su hora bajo el cielo.
Hagamos realidad una revolución nacional que sea humanista, solidaria, tolerante, realmente feminista y anti-puritana; que se respete el debido proceso constitucional a todo nivel, el derecho al libre desenvolvimiento de la personalidad y la libertad de expresión, sobremanera cuando la ejercen revolucionarios que por su irreverencia caen mal a las élites, esos a los que llaman “electrones libres”.
07 marzo, 2020
Nuevo rector presidente del CNE
Jesús Silva R.
Independiente, imparcial, impoluto, apolítico, casi celestial. Así debe ser el nuevo rector presidente del Consejo Nacional Electoral de Venezuela. Que no sea ficha de nadie y que lo nombren por meritocracia. Tolerado por el gobierno, respetado por la oposición, reconocido por Estados Unidos, la Unión Europea, el Grupo de Lima y Japón. Que tambien lo avale Rusia, China, Irán, Cuba y los demás países latinoamericanos con gobiernos de izquierda que aún quedan en la región.
Que VTV lo exhiba pero sin hacerlo ver como empleado del gobierno ni militante del Psuv. Que tampoco acepte ir a cócteles vespertinos en embajadas capitalistas porque la mujer del César debe parecer honesta.
La pregunta es si este ciudadano existe en Venezuela, el país políticamente más polarizado del mundo. Y si existiere, el desafío es que los grupos de poder, de lado y lado, se decidan a su nombramiento; porque la tentación de controlar el CNE es muy grande e inclusive compromete la supervivencia de las cúpulas políticas alérgicas a la democracia liberal, la división de poderes, el «check and balances» y etc.
Ese venezolano ideal, que tendrá el voto decisivo en el CNE, deberá convivir con un directorio teóricamente conformado por dos miembros pro gobierno y dos pro oposición. Sus desafíos son inmensos, en 2020 debe garantizar condiciones electorales satisfactorias para los comicios de la Asamblea Nacional.
Un tema inevitable es la legalización de todos los partidos políticos. Si hay arlequines sin pueblo con partidos de maletín legalizados por la vía «express», cuesta explicar que los «chicos malos» no tengan partidos legales por supuesta falta de firmas. El nuevo procer del CNE tendrá que resolver esto convincentemente o no conquistará prestigio en su cargo.
Llevar el barco electoral a buen puerto este año, es decir, hacer que oposición y gobierno queden conformes, prácticamente lo consagraría como rector. No es fácil revivir el entusiasmo votante de toda una nación fatigada por problemas de todo tipo.
Alerta, hay muchos chavistas descontentos por crisis económica que ya hablan de abstenerse este año. Hay opositores convencidos de que existe trampa en el CNE y por lo tanto tampoco quieren votar.
Una baja participación electoral sería como un gancho de izquierda al hígado de la patria en sus aspiraciones de que EEUU y sus aliados eliminen las ilegales sanciones económicas. Dicho de otro modo, las elecciones legislativas deben ser políticamente eficientes con más de la mitad del padrón electoral votando o de lo contrario la situación del país no mejorará en el contexto internacional.
Al conflictivo año 2020, se le agrega el pleito de las «dos directivas» de la Asamblea Nacional. La encabezada por Guaidó no designará al nuevo CNE porque la directriz de EEUU es no reconocer a las instituciones venezolanas. Además el TSJ dice que el parlamento está en desacato y por ende todas sus actuaciones son nulas.
Tampoco será Luis Parra, como jefe del legislativo, quien firme nombramiento del nuevo CNE porque se sabe que no tiene suficientes diputados para ello y habrá más controversia. Ni Parra ni Guaidó se mandan a sí mismos, ellos obedecen a sus jefes políticos, por lo tanto jamás se unirán para designar un CNE.
Todo indica que el TSJ, por vía constitucional de omisión legislativa, es quien está en mejores condiciones para nombrar al CNE. Jurídicamente tiene facultad para ello y sólo faltaría el visto bueno de oposición y gobierno para que el nuevo poder electoral tenga nuevos rectores en un escenario de tregua política que le permita trabajar y que sus decisiones gocen de respeto ante nuestro país y más allá.
¿Cuál será la posición de este alto funcionario ante el constitucionalmente factible referendo revocatorio presidencial de 2021?
¿Qué dirá este nuevo burócrata sobre un posible llamado, o ausencia de llamado, a elecciones generales que formule la Asamblea Nacional Constituyente si se sigue la doctrina constitucional de 1999?
¿Tendrá coraje para pronunciarse? Y voy más lejos con mi pregunta ¿hará algo?
En resumen, el nuevo rector presidente del CNE tendrá la credibilidad que emane de su ejemplo pues como dice la santa palabra: por sus actos los conoceréis. Está historia continuará…